El SIDA en África: El malo de la película

Hoy os voy a dejar un post en el que he dedicado varios días a recabar información y el cual creo que es muy idóneo dada las circunstancias en la que estoy viviendo este voluntariado en Kenia. Os escribo un artículo sobre el SIDA, un virus (al fin y al cabo es un virus), el cual provoca la mayor tasa de mortalidad en África subsahariana, muy por encima de los conflictos armados o la malaria. Este mes durante este proyecto estoy pudiendo ver el desarrollo de este virus en más de 100 niños, conviviendo con ellos y por lo tanto teniendo una idea de cómo afecta a la persona. Muchos de estos niños no saben ni cual es su cumpleaños, ni saben su apellido y bastantes cuentan que su primer recuerdo en la vida es su llegada al orfanato pero todos tienen en común que tienen el virus. Quiero decir de primeras que el SIDA posee una prejuicios enormes. Tener el virus en España no imposibilita que puedas vivir hasta los 80 años, tener hijos y llevar una vida normal como cualquier persona sin contagiar. La clave se encuentra en los antirretrovirales, el poco dinero que se destina al desarrollo de los mismos y la forma de su distribución sin lucrarse en los diferentes países, especialmente donde me encuentro.

Este artículo lo he basado principalment en una serie de documentos de Mark Schoofs que ganó el premio Pulitzer 2000 al mejor reportaje internacional, en el cual explora el sida en África. Durante 6 meses analizó las diferentes caras de la epidemia del sida, tanto la social, con su ramificaciones humanas, como la científica. Aspectos como la respuesta heroíca de la población africana, la escasez de medicamentos y sus consecuencias mortales; el origen y el futuro del sida...etc. Muy recomendable quien quiera profundizar en esta pandemia.

Se tienen diversos conceptos de cuál fue el origen del SIDA pero uno de ellos es a través de Amadine. Fue el primer chimpancé que se descubrió que estaba infectado por el SIV (virus de inmunodeficiencia símica), el equivalente el VIH en lo sismios. Debido a la similitud genética entre los virus del chimpancé y del hombre, parecía que el VIH había tenido su origen en los chimpancés, una tería sólo confirmada en febrero del 2006 por la investigadora Beatrice Hahn de la Universidad de Alabama.Aún así, existen pruebas contundentes de que el vierus ha pasado de los animales a los seres humanos en al menos siete ocasiones. Desgraciadamente, la forma en que se ha dado a conocer este descubrimiento científico, de capital importancia, está arruinando su credibilidad en África, el lugar en el que se producen la mayor parte de las nuevas variedades de VIH.

Sólo han pasado 25 años desde que el SIDA fue detectado pro primera vez en África, a orillas del Lago Victoria, pero este virus ya ha matado a más de 11 millones de africanos subsaharianos. Os dejo aquí algunos datos sobre el VIH en África datados en 2009. Más de otros 22 millones se encuentran infectados en esta zona del continenete. Sólo el 10% de la población mundial vive al su rdel Sáhara, pero esta zona es el luugar en el que viven las dos terceras partes de los seropositivos del mundo y ha sufrido más del 80% de todas las muertes del SIDA. El Sida es una infección de desarrollo lento, que se incuba en las personas durante un plazo de entre cinco a diez años antes de matarlas. La esperanza de vida en más de una docena de países africanos será pronto 17 años más corta por culpa del virus, de 47 años en lugar de 64.

Por lo que los antirretroviarales y las vacunas suponen la clave de toda esta pandemia mundial. El coste anual de administrar a cada africano con VIH una terapia de triple combinación superaría los 150.000 millones de dólares, con lo que el mundo permite que mate millones de vidas una enfermedad infecciosa mortal, la principal, para la que existe tratamiento. Todo esto sería quizá más digerible si hubiera un Plan Marshall para l a prevención del SIDA que retardara la propagación del virus. Para decirlo sin rodeos, el SIDA esta en camino de dejar pequeña a cualquier otra catástrofe de la que se tenga constancia en África.


El drama de la enfermedad afecta también a la aceptación de muchas personas de si lo tiene o no. Muchas familias se niegan todavía a reconocer que el VIH está matando a sus parientes y prefieren decir que esa persona ha muerto de tuberculosis o de cualquier otra enfermedad ocasional y en ocasiones los médicos colaboran en esta negación de la realidad. A su vez, la falta de educación arruina los esfuerzos de prevención.  No sólo educación en materia sexual por los contagios si no a su vez también en higiene. Con todo, el SIDA no es simplemente un relato de la deseperanza. Cada vez más, los africanos unen sus esfuerzos, aunque con recursos mínimos, para atender a sus enfermos, erigir orfanatos e impedir que el vierus se lleve a los que más quieren. Yo lo veo cada día aquí a mi lado, como los niños se toman la medicina y los médicos y enfermeras los cuidan por lo que valoro este esfuerzo mucho mayor si cabe. Sus esfuerzos ofrecen una cierta esperanza, pues en tanto una crisis de esta magnitud es capaz de desintegrar la sociedad, también puede llgar a unirla.

¿Qué aporta el SIDA  a la imagen de África?. Muchas personas considerán a este continente como una "sociedad enferma, sexualmente enferma". Eso está en la línea de tantos estereotipos que se tiene sobre África. Al igual que el tema de la sexualidad visto desde muchas culturas puede suponer un tema que levanta susceptibilidades y que en África, está cargado de connotaciones raciales. Los blancos han cariturizado la sexualidad africana durante siglos, y se tienen el prejuicio totalmente erroneo que la razón por la que el VIH está en plena expansión es por culpa de los africanos. Otro tema muy interesante a tratar sería el de la prostitución en África, la cual se realiza con una higiene muy lejos de poder llamarse "mínima".

Me despido por hoy con este post, sencillo pero bastante claro de la epidemia a la que se enfrenta el mundo diariamente, especialmente países cómo el que me encuentro. Cuando me levanto y juego, enseño y comparto tantas cosas con estos niños, se me olvida por completo que tienen SIDA y por lo tanto muchas veces no pienso en que pasaría si de alguna forma me contagiara. Es altamente improbable que pase ya que la única posiblidad sería por contacto de una herida abierta mía con una suya, con lo que tomamos precauciones para que no exista ningún riesgo. La semana que viene os contaré más en detalle sobre las clases de los niños y seguiremos con más "memorias de África".

Asante Sana Kenia